El mate de los Guardiamarinas

Después de haber visto el mate del loco y el mate del pastor, llega el turno de otro de los mates más rápidos, a la vez que inusuales, del ajedrez, el mate de los Guardiamarinas. Este nombre se debe al título de una opereta, El Guardiamarina, en la que se representa una partida de ajedrez viviente que concluye con este mate.

Para que las negras den el mate de los Guardiamarinas, las blancas han de arrancar con e4. Le siguen e5, Cf3 y Cf6. Esta salida se denomina Defensa Petrov o rusa.

 

El blanco continúa con Cxe5, y el negro, en vez de recuperar el peón con su caballo, juega C6. Le siguen Cxc6, dxc6, d3 y Ac5. Mientras las blancas defienden su peón de rey, las negras se preparan para atacar el punto f2. El blanco responde con Ag5, clavando el caballo.

 

En esta posición, se produce una jugada sorprendente en busca del mate: Cxe4. El blanco captura la dama con el alfil, Axd8, sin pensar en la amenaza de mate en dos jugadas del negro. Éste juega Axf2. El rey tiene una sola escapatoria, e2, pero seguidamente las blancas dan mate con Ag4.